Las primeras carreras de coches en Gipuzkoa
Nuestra provincia fue pionera en las carreras de coches a principios del siglo pasado, copiadas de Francia
En 1901 se matricularon en España 47 coches, 36 de ellos en Donostia, según la documentación que se guarda en la Jefatura de Tráfico. Tal vez por eso Gipuzkoa fue pionera en crear las primeras carreras de coches de montaña, como la subida a Igeldo que el RCAG organizó el 22/4/1908. Esa y otras pruebas más después, dado que el circuito de Lasarte no comenzó hasta 1923. A estas primeras carreras ayudó mucho su cercanía con Francia, líder entonces en todo lo referente a este incipiente deporte y gran industria.
Estas primeras carreras causaron furor entre la gente, de forma que algunas hasta se convirtieron después en las grandes clásicas que hoy conocemos: Le Mans, Monza, Mónaco, etc. El “I Campeonato del Mundo de Coches” se celebró en Italia en 1925, y sirvió para ir unificando normas hasta llegar al automovilismo de competición actual. La fórmula I empezó en 1950.
Fue en abril de 1908 cuando Hispano Suiza empezó a competir para promocionar su marca, creada el 14/7/1904. Lo hizo en Igeldo con dos coches, y fue primera en su categoría con el modelo 20HP. En septiembre de 1909 volvió a ganar allí en su categoría, con Zucarelli, quien también ganó el circuito Irura-Villabona y la subida al Mont Ventoux en la Provenza pilotando el coche 12/15HP de la foto 1. En 1910 ganó los Grand Prix de Ostende y Boulogne compitiendo con los mejores coches del mundo en su categoría, y en la década siguiente muchas más pruebas.
Biplano guipuzcoano
Para organizar todo esto hubo que andar mucho camino, y ahí esos primeros ‘sportsman’ de aquí, entendiendo como tales a ciertos practicantes que hacían deporte de forma limpia, y que hasta se implicaron después en la organización de eventos, donde trabajaron mucho y bien, según veremos ahora. La mayoría eran de clase social alta, y entre ellos estaban los donostiarras Vicente Ameztoy, Felipe Azkona y Juan Mugica (hijo del dueño de ‘Herederos de Ramón Mugica’), quienes hasta construyeron un biplano e intentaron volar con él en Vitoria el 17/5/1909.
A este Ameztoy, que hizo de piloto en esa primera prueba aérea, también le veremos después siendo vicepresidente de RACG con Vicente Rezola de mandatario. Otro fue Ramón Irazusta, señalado con dos círculos rojos en las fotos 2a y 2b, al que vemos esquiando en la segunda foto de 1908, junto a su famoso Fiat. Años después este Ramón Irazusta fue vicepresidente del RACG.
Otro deporte de motor, muy ligado entonces a las carreras de coches, eran las pruebas de motos, que arrastraban muchos aficionados. Se recuerda la celebración de una carrera a Igeldo ya en 1903, aunque la creación del ‘Moto Club de Guipuzcoa’ se hizo tras una excursión de ‘moteros’ a fiestas de Villafranca el 19/8/1915. (sic)
De este nuevo ‘Moto Club’, dado que antes hubo otro que desapareció hacia 1912, salió elegido presidente Miguel de Urreta, y aquí también vemos al gran Ramón Irazusta como vicepresidente. Lo cuentan Joaquín Zabalza y Enrique Aguirre, autores del libro ‘El motociclismo guipuzcoano: 100 años del Real Moto Club Gipuzkoa (1915-2015)’.
Ese era el espíritu de los ‘sportsman’ de la época. Incluso en el montañismo, pues Antxon Bandrés Azkue también estaba organizando ya salidas montañeras al Gorbea en 1912 con idéntica filosofía: deporte limpio; y, éste, loando además los beneficios del ejercicio al aire libre (doce años después fue el primer presidente de la FVNM), según lo recoge Antxon Iturriza en su libro ‘Historia del Montañismo Vasco’.
Y así siguieron otros después en este nuevo mundo del automóvil. En la foto 3 vemos el histórico Hispano Suiza 15/20 de 1913, único aquí en su serie, de matrícula HU 55. El coche adquirido en Galicia tiene una gran historia detrás que veremos en el próximo artículo. En la foto vemos a Echeverria guiando la carga del coche.
Decir también, que Agustín Mañero y Gregorio Mendiburu, dueños del Garaje Internacional en la capital, crearon allí el famoso coche Donosti que veremos igualmente después. Mañero fue otro pionero en motores y aviones de época. Lo recordaba en sus memorias su nieto Agustín Mañero Fernández.
Tras la utilización de los campos de Ondarreta como aeródromo ya en 1911, siendo Ramón Irazusta representante de la asociación OTIE (después IATA), éste también fue el primer ‘adjudicatario-gestor’ del nuevo aeródromo de Lasarte, inaugurado el 24/6/1920. Para entonces Ramón y su hijo ya habían efectuado uno de los primeros vuelos a motor desde Biarritz con aterrizaje en Lasarte el 22/8/1919, según cuenta Félix Elejalde en su libro ‘La Avión en Gipuzkoa, 1908-1996, crónicas y anécdotas’. La primera mención documentada de aterrizajes en Lasarte es del 7/5/1919.
Si quieres recibir la revista Txantxangorri cada mes y leer los contenidos antes de que se publiquen online, puedes suscribirte aquí.
Si te ha gustado síguenos en X, Facebook e Instagram para seguir disfrutando de nuestros contenidos. Además, si quieres hacernos llegar alguna propuesta o informarnos de algún evento puedes escribirnos a txantxangorri@txantxangorri.info. |